Siempre me pregunte acerca del habito masculino de dibujar sendas pijas, tambien llamados penes, garlopas o chotas, en las puertas de los baños de hombre. Uno va al baño, se sienta en el inodoro para hacer lo suyo, cierra la puerta para tener esa fragil pero preciosa intimidad que es indispensable para el buen cagar y, ¡zas!, se encuentra con el grotesco dibujo del organo genital: Ahi, al nivel de la cara o al de la cintura, como un enigma de mal gusto.
No puedo siquiera contar la cantidad de veces que me succedio esto ultimo, esta secuencia. Con el tiempo, uno aprende o bien a ignorarlas, o bien a dibujarlas, o bien a preguntarse acerca de ellas. En mi caso fue esto ultimo. ¿Cual es su sentido? Tengo que admitir que mi curiosidad de psicologo se activa instantaneamente con estas cosas. En efecto: ¿que lleva a un tipo, a un tipo que tiene su vida, sus problemas, que probablemente viene o esta en el trabajo, que tiene cuentas que pagar, a sacar un lapiz o un marcador o una moneda para a continuacion garabatear una pija en la puerta del baño?
Uno puede postular sin mucho esfuerzo todo un abanico de teorias y de hipotesis: Que es obra de degenerados homosexuales, que es un reducto arquetipico del primitivo culto falico, que es producto de adoradores del dios Shiva o del Divino Dionisos, que es producto de una vanguardias litopornografica, que es una expresion del estallido de la libido masculina, que es algun tipo de pintura rupestre con fines magicos , que es una marca infaltable de la viveza criolla y del machismo porteño. Y del mismo modo, surgen tambien las correspondientes preguntas: ¿no es raro que las pijas esten siempre del lado de adentro? ¿Acaso el dibujante no realiza que esa pija estara siempre destinada a los ojos de otros hombres? ¿por que estan siempre grotescamente talladas, con un trazo epileptoide o una morfologia que recuerda al mono o por lo menos al salvaje?
Naturalmente, uno podria pensar que el pensamiento causal realiza facilmente la transiccion de la funcion urinaria a la funcion sexual o reproductiva o, dicho de otro modo, la transicion entre el pene y la pija. Quizas sea que en la intimidad del cubiculo el hombre redescubre su organo masculino, o tal vez el falo sea el articulo artistico mas interesante dentro del cubiculo, seguidito de cerca por la mierda o por las agresiones de indole deportiva.¿
Quien sabe.