28 jun 2019

Aprendiz de Brujo

Los cálculos, los había revisado al menos veinte veces. Los resultados coincidían una y otra vez, con exactitud. Si pero ¿ y las cartas? También. Lo había repetido con varios métodos y siempre salia la misma tirada. La disposición de los arcanos variaba, por supuesto, pero de un modo tal que el mensaje venia a ser exactamente el mismo. Como si usase diferentes recetas para obtener el mismo resultado. Como si usara varias palabras para expresar exactamente el mismo concepto. Y, mas precisamente, como si utilizara diferentes mapas para llegar al mismo sitio desde diferentes caminos.

Y no eran solo los cálculos y las cartas. También estaban las  manos. Las manos eran también mapas que le marcaban el rumbo. Las formas entrecruzadas de la tercera y la séptima, correctamente interpretadas y sumadas al arco extraño de la segunda y la quinta, le arrojaban que el espacio y el tiempo eran propicios a un acontecimiento importante, a un hecho crucial en su vida.

Un experto en  solo alguna de las disciplinas que dominaba (y eran muchas) no habría podido ver el cuadro completo. Es cierto que algunas ciencias, mas universales que otras (como el Tarot o la Oniromancia) daban una visión mas amplia, mientras que las demás solamente indicaban partes o cuestiones del asunto. Las manos, por ejemplo, le habían señalado esos días como cruciales. Pero, ¿cruciales para que, en que sentido? Aquí se acababan las posibilidades del experto unidireccional. Era necesaria una sabiduría universal, es decir, compleja, múltiple:  manejar todas las disciplinas, conocerlas en detalle, para poder relacionarlas y entender el complejo mensaje. Aplicando sobre los pasajes del Apocalipsis ciertas claves del Numerorum Mysteria de Pietro Bongo fue que había descubierto el "donde", es decir, las coordenadas exactas. La ubicación misma reforzó su sentido de que el mensaje de las manos, las cartas y los cálculos estaba especialmente dirigido hacia el, pues el acontecimiento ocurriría en el almacén que quedaba, créanlo los escépticos, justo enfrente de su casa.

El viejo Schliemann había hallado Troya en Hisarlik siguiendo las claves (ocultas y no tan ocultas) contenidas en los libros de Homero, el genial poeta ciego. ¿Por que el no podía hacer lo mismo indagando en los libros de otro poeta, también genial, también ciego? Todo había empezado el mismisimo dia que, sentado en la chocolateria La Giralda, habia empezado (y terminado esa misma tarde) a leer "El Aleph". En esa epoca todavia desperdiciaba su tiempo estudiando Literatura Argentina como parte de su eterna licenciatura en Letras.

¿de que manera, mediante que método que lo había notado? Habia pasado tanto tiempo desde la revelacion de esa tarde que ahora no podía decirlo con seguridad. Quizas fue gradualmente, cuento a cuento. O quizás (esto le gustaba pensarlo) había sido en un fogonazo revelador de subita comprension. Un instante de explosiva claridad similar a la manzana de Newton o al Eureka de Arquimedes. ¿que es lo que habia descubierto? Sencillamente que "El Aleph" no era un libro de cuentos, es decir, una coleccion de historias que, aunque en algunos casos posiblemente solidarias, son autonomas y autoconclusivas. El Aleph no era una coleccion: Era una Novela. Una novela de tesis o, si se queria, un tratado. Una novela de aprendizaje, un mapa del Grial.

Bueno, en realidad no se mencionaba grial alguno. "El Grial" habia sido un termino que habia acuñado el mismo. Un guiño literario tal vez, pero de todos modos muy adecuado porque, ¿acaso era el grial mismo un grial? ¿era la piedra filosofal una piedra? ¿realmente era oro el oro de los alquimistas? Simbolos, metaforas, alegorias. Todos los misterios se expresaban en el lenguaje de la poesia, que siempre es claro para quienes tienen la luz pero oscuro para los que estan en tinieblas. ¿Que era lo que buscaban Arturo y Percival? No era imposible que fuese lo mismo que buscaba el. Despues de todo, ese tipo de milagros sobrevivia a traves de las epocas, eternamente. Un objeto infinito deberia de recorrer, en un planeta finito, infinitamente todos los lugares posibles. Dicho de otro modo: Era imposible que el Grial no hubiese estado ya casi infinitas veces en todos los sitios posibles. Era solo cuestion de saber donde estaba en cada momento... siempre y cuando se tratase de un objeto, por supuesto. Porque tambien podia ser una situacion: un entrecruzamiento de planetas, un dibujo en el cielo, una melodia en particular, la conjuncion de ciertas piedras, una tormenta. Y por supuesto que tambien podia ser una persona o un animal o un coral. Y mismo si era un objeto, no habia por que suponer que fuese un objeto particularmente importante. No tenia por que se la espada del Dios Martes que encontro Atila o el Caliz de San Jose de Arimatea. Quizas fuese una pequeña piedra perdida en la campiña de Bologna, o un cigarrillo tirado entre las calles de Shangai. ¿Acaso el Zahir no estaba en una moneda de 20 centavos? ¿Acaso el Aleph no estuvo, aunque sea un tiempo, en cierta escalera de cierto sotano porteño?

Por supuesto, todas estas eran especulaciones que el habia rumiado muchas veces, tal vez incluso las habia rumiado todas aquella misma tarde en La Giralda. Ahora ya podia descartarlas: Estaba un paso mas alla. Sabia que El Grial no era ni persona ni objeto ni situacion ni lugar: era todas ellas a la vez o por separado. Fuese lo que fuese, pasaba de una cosa a la otra de manera indistinta, fluida, incomprensible, indetenible. Era como un brillo que tanto estaba aqui como alla. Borges habia dado muchisimas pistas. El Zahir era una palabra arabe para "notorio" o "destacable", e incluso dice que "En tal sentido, es uno de los noventa y nueve nombres de Dios". Esto era claramente una metafora. Dios no tiene ni un nombre ni noventa y nueve. Si tiene un numero de nombres, es decir de atributos, este numero es infinito. Siguiendo la doctrina del gran Spinoza, ¿no podria pensarse que no son dos sino tres los atributos de Dios que podemos percibir, y de los cuales consta el Universo? Uno seria materia, otro seria la forma. La tercera, sea lo que sea, la cual podiamos identificar por una fascinacion o notoriedad inexplicable, era El Grial. Ahora comprendia que intentar explicar el grial seria como intentar explicar las nociones de forma o materia sin ayuda de ejemplos concretos. Pero mientras que estabamos rodeados de materia y de forma, el grial era esquivo de un modo tan fuerte como era concentrado su efecto.

Una moneda de 20 centavos en Buenos Aires, un tigre en Guzerat en el siglo XVIII, un astrolabio en Persia, una brújula en el siglo XIX, una veta en el mármol de un pilar en la aljama de Córdoba, el fondo de un pozo en Tetuán. Borges comenzaba su cuento con esta lista de objetos. Todos habian sido, en algun momento, de algun modo, por algun tiempo, El Zahir. ¿Como explicar la contradiccion entre la naturaleza divina del Grial y su aparicion discontinua en el espacio tiempo historico? El habia encontrado la respuesta en el estudio de la obra de Platon y de los filosofos posteriores que siguieron su ejemplo. Era la misma naturaleza material (espacio - temporal) de nuestro mundo lo que obligaba a las ideas perfectas a fragmentarse en unidades imperfectas pero complementarias. Del mismo modo que la luz debe reflejarse y descomponerse para permitirnos ver las cosas, asi tambien las revelaciones deben irse construyendo con la tediosa acumulacion de objetos, lugares, personas, situaciones, narraciones. Si, tambien narraciones. Ahora comprendia porque Borges jamas habia escrito novelas. El cuento era la unidad perfecta para expresar la fragmentacion del uno en sus diferentes configuraciones. La continuidad y el sentido general no podia ser brindada, regalada. Y justamente eso mismo era lo que hacia la novela.

Esa tarde comprendio el sentido general de la obra de Borges. Comprendio la enorme metafora que representaban sus cuentos. Comprendio que "la biblioteca de Babel" era metafora de metafora. Los distintos cuentos trataban todos de la naturaleza del Grial (Aleph, Zahir, La escritura de Dios, Averroes, Asterion) o de arquetipos de buscadores del Grial (El muerto, Emma Zunz, el Inmortal, Los Teologos). Habia varios elementos que se repetian hasta el hartazgo, en enigma y en espejo: el laberinto, el punto central, la ubicuidad, la inmortalidad y la venganza. Los primeros podia entenderlos como propios de la naturaleza del Grial encarnado o personificado. Pero, ¿que pasaba con la venganza? Era el unico punto que seguia manteniendose oscuro para el. Pero tenia una teoria: el Grial, fuese lo que fuese, podia usarse como un arma. Podia usarse para la Venganza. ¿Tenia el alguien de quien vengarse, alguien con quien hacer justicia? Por supuesto que lo tenia.

Entonces se decidio. Desde esa tarde se metio de lleno en las ciencias ocultas. Estudio durante años. Cabalistica, Numerologia, cualquier tipo de mancia o magia interpretativa. Capnomancia, Piroscopia, Hidromancia. Habia leido todo tipo de libros sobre el tema: desde los tipicos tratados comerciales de la Editorial Kier hasta los diccionarios de Colin de Plancy y la Divinatione Madre de la Supersticio, de Cicerón. Habia aprendido a encontrar un sentido en todas las cosas. Podia entender el vuelo de los pajaros y las entrañas de los animales. Podia leer tanto la borra del cafe como la forma de una nube. Encontraba intrincados sentidos Litomancicos en la posicion de las cosas y interconectaba mensajes ocultos en todos las obras de literatura que tenian cierta antiguedad o prestigio. Sabia que si habia descubierto la existencia del Grial, tarde o temprano lo encontraria, y que nada puede ser en el pensamiento del hombre sin que pueda realizarse en el mundo material.

Y asi fue. Poco a poco fue recibiendo las señales. Las primeras espaciadas por años. Luego fueron intervalos de meses. En el ultimo mes, los ciclos se habian acortado hasta casi desparecer. Tenia la sensacion de que todas las señales volvian juntas, clarificadas, potenciadas. Sentia que el tiempo mismo se aceleraba, que un velado ballet cosmico se acercaba a su gran final, que los astros de su existencia confluian en un punto unico e irrepetible, en un Kairos que tanto podia aprovechar como dejar pasar. Si fallaba, podria intentarlo de vuelta en esta vida o en las proximas. De lo que estaba seguro es de que era un buscador, un Parsifal moderno. Quien sabe, tal vez fuese el mismo Parsifal de la leyenda. Habia recibido la ultima señal en un sueño, esa misma madrugada. Ahora lo sabia: el Grial era ahora un objeto. Seguiria siendolo por un tiempo, al menos hasta el dia siguiente. ¿Donde estaba? Estaba en el almacen de enfrente de su casa. ¿cuando? Ahora mismo. Todo esto ya casi lo sabia antes. Pero ahora tambien sabia que era.

Se vistio sin prisa y bajo las escaleras. Recorrio el pasillo mirando el cielo aun encapotado por las lluvias de la mañana. Abrio la puerta y salio a la vereda. Miro al almacen, justo frente a su casa, solamente separado por la calle. Habia dos o tres personas comprando. Cruzo y entro.

El almacenero vio, mientras cortaba queso bien finito en la fiambrera, como aquel chico, que era cliente suyo y vecino del barrio, se metia inescrupulosamente una lata de atun en el bolsillo de la campera. Disimulo el asombro. No era la primera vez que alguien intentaba robarle mercaderia en las narices. Como si nada hubiera pasado el almacenero continuo atendiendo, uno a uno, a los clientes. Dejaria al ladron para lo ultimo.

Cuando le llego el turno, el chico eligio dos o tres cosas sin relacion aparente. El almacenero se dio cuenta de que parecia muy seguro. ¿acaso creia que podia robarle en su propio negocio? Ademas de almacenero, el almacenero era tambien administrador de empresas. Tenia el almacen hacia casi 20 años. Era conocido en el barrio. No iba a dejar que le birlaran mercaderia, ni aunque fuese una lata de atun.

El muchacho pago sus cosas e hizo el ademan de retirarse. El almacenero lo llamo por su nombre. El muchacho se detuvo, se dio vuelta, lo miro como diciendole: ¿en que te puedo ayudar?

- Y decime - dijo el Almacenero - ¿la lata de atun me la pensas pagar? -. El muchacho no se inmuto. Tranquilamente reviso en la bolsa de compras.

- No compre ninguna lata de atun - dijo.

- Por supuesto que no - dijo el Almacenero - Yo digo la que te metiste en la campera-. El muchacho lo miro sin expresion. No parecia nervioso ni avergonzado. A lo mejor le importa un pito si lo atrapo o no, penso el Almacenero.

- Pero si no tengo ninguna campera - dijo el muchacho. Y es cierto, no la tenia. El almacenero, evidentemente confundido, volvio a mirar al muchacho y pestañeo. Iba de remera. Una remera de greenpeace. Pero hace un minuto... no, hace apenas unos segundos llevaba puesto un campero verde. Era imposible que se la hubiese sacado porque, ¿donde estaba? ademas no habia dejado de mirarlo y no recordaba haberlo visto siquiera sacarse las manos de los bolsillos, salvo para pagar. Aun las llevaba en los bolsillos. ¿habria alucinado? Una parte de su cerebro le decia que asi era, que asi tenia que ser, que las camperas no aparecian y desaparecian por arte de magia. Otra parte, sin embargo, le gritaba con una voz muda y desesperada que pese a todo el chico habia entrado usando una campera y que se habia encanutado una lata de atun en el bolsillo derecho de esta.

- Cuando entraste, llevabas campera - dijo el Almacenero, mas queriendo convencerse que queriendo convencer al muchacho.

- Pero si ni siquiera entre - dijo el muchacho.

- ¿sos tonto? - dijo el Almacenero - Si me acabas de comprar... - Pero era cierto. Estaban afuera, en la vereda, parados uno en frente del otro. La bolsa que colgaba del brazo del muchacho hacia apenas unos instantes habia desaparecido.

- Buen dia - dijo el muchacho, y cruzo la calle hacia su casa. Bien - penso el muchacho - Fantastico. El grial efectivamente puede usarse como arma. Puede usarse para muchas cosas. Usualmente lo consultaria con los grimorios, pero ya no los necesitaba.




26 jun 2019

Neutro

Me encanta el color gris. Todos mis amigos y familiares lo saben. Es mas que un gusto estetico o una preferencia. Es una cromatofilia. Podria definirla como una preferencia totalmente irracional por esa magica mezcla de blanco y negro, por esa hermosa monotonía del tono, por esa aura aristocratica  contenida en el arco cromatico entre la nulidad y la plenitud.

Por extension, tengo un amor incondicional por todas las cosas grises: Cementerios, nichos, carreteras, el microcentro porteño, dias nublados y lluviosos, fotografias y peliculas antiguas. Tambien amo el humo y las cenizas, las nubles bajas y opresivas, y por supuesto la niebla. Todos mis trajes son grises, y tambien mis medias en su gran parte (tengo ademas negras y verde oscuras). Incluso tengo guantes grises. Como es dificil encontrar pintura gris para interiores, pinto las paredes de blanco y ilumino todo poco y mal. Si de mi dependiera la elección, habría creado el mundo en pura escala de grises. No veo la hora de llegar a viejo (me caen bien los ancianos) para poder lucir una hermosa y plateada cabellera. Jamas pinto las cosas de plomo y amo las relucientes superficies del acero.

Siempre tuve la esperanza de que, en el futuro, alguna tecnologia ocular u operacion medica me permitiese esto ultimo. Dicen que los perros y gatos ven en blanco y negro (horrorosa expresion, cuando puede decirse "en gris"). Si es asi, los envidio terriblemente. Es sin duda la mejor manera de ver. ¿Para que sirven, despues de todo, los colores? ¿para que todo ese verde y amarillo y rojo y violeta y los demás miembros de esa familia de molestos pacotilleros? ¡Yo acabaria con todos los colores!

Cuando le dije esto a alguien, me contesto que tambien deberia entonces eliminar el gris. ¡Pobre idiota, que supone que el gris es un color! Pues no. No lo es en absoluto. De hecho, si dividiesemos la realidad en las categorias metafisicas de sustancia y accidente, entonces todos los colores quedarian, naturalmente y siguiendo a Aristoteles, del lado de los accidentes. Pero el gris quedaria del lado de la substancia porque, en el fondo, verdaderamente, todas las cosas son grises en si mismas. Ver gris la verde lagartija. Ver gris el rojizo atardecer, ver gris el llameante fuego. ¡que no daria yo por esa vision de la verdad! El mundo de las ideas es monocromatico.

Como abogado del diablo, tengo que protestar contra las horribles asociaciones que normalmente se asocian con los gris: tristeza, aburrimiento, falta de sentido, nihilismo (mi ex psicologo me dijo una vez que mi cromatofilia era seguramente algun tipo de necrofilia sublimada y yo, como es natural, lo mande a volar), mediania, indecision, amoralidad, todas las facetas de la melancolia.

Ante esto, puedo y debo efectuar una poderosa defensa. Para empezar, gris es la materia del cerebro, organo del pensamiento y la razon. La expresion "materia gris" revela, quizas como ninguna otra, la naturaleza sustancial del gris. El gris es la forma visible de la sobriedad, de la templanza, de la epicurea sabiduria. Es la sabia aceptacion de la mortalidad y el esceptico rechazo a los papelitos de colores de la metafisica y la religion. Es el simbolo del progreso de la razon, cuyo simbolo mas palpable y patente es la maquina, reina de nuestro siglo. Grises son los animales mas grandes y sabios: El elefante sobre la tierra, la ballena bajo el mar. Gris es la soledad y la reflexion que inevitablemente, tarde o temprano, viene con ella. Gris es la noble plata de cascos y armaduras, y tambien grises son las joyas de los druidas. ¿Acaso no es gris la piedra que, apilada sobre su hermana, constituye el monumento que sobrevive a las miseras vidas de sus constructores? ¿Acaso no eran grises las columnas de Xanadu y los muros de Constantinopla? El objeto de contremplacion mas viejo del mundo, la Luna, tiene de gris pintada su heraldica figura. Gris es la apatia por todas las vanidades terrenales y celestiales. Si la realidad tuviese una percha sobre la que se monta, esta percha seria gris.

Teniendo en cuenta todo lo anterior, es obvio que me enamorase instantaneamente de la chica de los ojos grises. Naturalmente, fue amor a primera vista. Una vez lei, no recuerdo donde, que cuando nacen, todos los crios tienen los ojos grises. Esto, que sin duda se fundamenta en una serie de complicadas y aburridas explicaciones cientificas, tiene para mi una explicacion metafisica mucho mas simple: nacen con ojos grises porque todavia no estan corrompidos por el mundo terrenal.
La chica de ojos grises, entonces, se mantenia impoluta, pura como una santa. Sus lunas en miniaturas eran de un gris plata del mas puro tono. No tenian ni asomo de esos reflejos pardos o marrones que estropean tantos ojos. El suyo era un gris puro, sustancial y profundo, sin el minimo asomo de mixtura. Mirarlos brindaban el enorme placer de sentir con la mano un cuerpo perfectamente esferico y pulido, o de ver un lago en perfecta calma. También el sentimiento de satisfaccion de contemplar una pared perfectamente pintada o de ver dos cuerpos en perfecto alineamiento. Era algo magico, magnetico, enloquecedor.

Por supuesto, lo del amor a primera vista fue solo en una direccion. De la mia a la suya. Ella, que seguramente veia el mundo a traves de sus ojos de ceniza, no podia ver en mi mas que a otro ser perfectamente monocromatico. Indeciblemente bello pero, desgraciadamente para mi, en nada diferente a todos los demas. Me costo un tiempo entenderlo, pero ahora se que si nunca me amo verdaderamente, fue porque el amor era casi imposible para ella. Si yo viese todo en gris, tampoco podria dedicarme exclusivamente a nada en particular.

Pese a esto, conseguimos salir un tiempo. Fue luego de ser su admirador por meses, por años enteros. Mi insistencia, mi cortejo sin fin, dio sus frutos el mas nublado y neblinoso de los dias de invierno. Recuerdo nuestro unico invierno como si fuese la primavera de mi vida (por lo general todos mis inviernos son mis primaveras). Recorrimos las calles de Londres y Buenos Aires. Tuvimos paseos bajo la luna y sobre la nieve. Nuestra felicidad era la mas inmensa de las monotonias. Confieso que soñe que llegariamos a viejos. Entonces podria ver, junto al lago de sus ojos, un hermoso valle plateado. Hubiera sido perfecto, mas no lo fue.

Se termino un dia horrendo de verano, con un inmenso sol anaranjado y un cielo de un azul infinito. Ella se iba. Viajaba al Norte, en busqueda de otros horizontes, de otros colores, de otros lenguajes. Yo me quedaba aqui, en Buenos Aires, entre los edificios y los faroles. Nunca he podido salir de la ciudad, abandonar el cemento y el asfalto, y los cielos encapotados de la ciudad, su aura increiblemente gris, seria imposible para mi. Senti enormemente su partida, la cual por mucho tiempo considere una traición, una deserción. Ella me lo dijo, me lo habia dicho: este ambiente la sofocaba, la petrificaba. Necesitaba vida, color, movimiento. Color. Uso expresamente esa palabra. Una parte de mi la supo irremediablemente perdida, y mientras que la otra la imaginaba todavia entre la niebla, la otra la sabia bajo el sol en un verde prado, probablemente con los ojos de un tono verdoso amarillento. Y hasta aqui puedo seguirla con mi torturada imaginacion, la cual nunca se atreve a ir mas alla.

Desde ese día estoy solo. No he vuelto a encontrarme con otra chica de ojos grises y, pensándolo bien,  es muy dificil que vuelva a tener tanta suerte. Después de todo, solo el 3% de la población mundial tiene ojos grises.

La Picuda

Si el lago tuviera limites la picuda nunca nos daría alcance.

- ¿el lago? -

El lago, por supuesto. Un lago, por definicion, es una masa de agua, generalmente de extensión considerable. Seguro ustedes, que nacieron hace poco, no entienden a lo que me refiero. Antes todo esto solo era una parte, y el lago estaba delimitado. La picuda solo llegaba hasta el limite. No podia pasar de ahi. Nosotros si podiamos. Ibamos un poco mas alla y no podia alcanzarnos. Hasta nos burlabamos de ella. Era divertidisimo.

- ¿todo esto? ¿el lago? - 

Es natural que no lo entiendan. Por definicion... no. Por Logica, un lago siempre esta delimitado. Del mismo modo las montañas dan al valle y la los cuerpos en a la luz generan sombra. Un lago que no tuviera limites seria infinito. Y un lago infinito dejaria de ser un lago... seria...

- ¿Seria... -

Seria todo, pasaria a ser todo, a ser la realidad misma. A ser lo que es ahora, lo que ustedes ven y tocan. Ahora es todo lago. O mas bien: lo que ahora es todo lago antes era parte lago y picuda y parte tierra y nosotros burlandonos. ¿entienden?

- No entendemos -

Hum... supongo que hay otra forma de explicarlo. Desde otro angulo, tambien podria definirse al lago como el limite mismo de la Picuda. Entonces, si hay picuda es lago, si no hay picuda, ya no es lago. ¿Esto lo entienden?. Bien. ¿Se puede escapar de la picuda?

- No se puede. Lo que encuentra se lo come, lo que persigue lo mata, y si no encuentra, busca - 

Exacto. Vivimos aterrorizados por ella. Siendo despedazados por su pico. Siendo tragados por su largo cuello. Sus plumas nos cortan la cara y las manos. Sus garras nos parten los huesos. Sus horrendos chillidos nos despiertan en plena noche. Sus fauces mastican a nuestros hijos y sus intestinos digieren a nuestros padres. Pero eso solo es ahora. Es un largo ahora que parece un siempre. Pero no lo es. Antes no lo era.

- ¿y entonces? - 

Entonces es importante tener memoria. Porque saber que lo que es, no fue, es saber que lo que es puede volver a dejar de ser. Es saber que las cosas pueden cambiar.

- La picuda dice que siempre fue -

No la escuchen. Si no pueden escaparse, si no pueden resistirla, al menos no la escuchen, Lo le presten oido, Si vamos a morir, al menos que sea en posesion de la verdad.

- ¿como pudo pasar? Lo que es, tiene que haber sido. La picuda tiene razon - 

Bueno, supongo que ya es tarde para ustedes. Despues de todo, no son otra cosa que alimento de Picuda. Pero yo tampoco se como ocurrio. Un dia, como si nada, la logica de la realidad se desplomo. Cayo. Dejo de funcionar. Los limites invisibles se rompieron y el lago empezo a desbordarse. Crecia dia tras dia, como una sombra. Y nosotros, que siempre nos habiamos burlado de la picuda, de ese mostruo inmundo, solitario, maloliente y patizambo, comenzamos a temblar al ver que las orillas del lago llegaban hasta nuestras casas, hasta las casas de nuestros amigos.
Y la picuda, practicamente no se habia comido a nadie durante decadas, que habia soportado las burlas de grandes y pequeños, que habia sido apedreada y alimentada con desperdicios, ahora reia dia tras dia. Ahora recorria freneticamente en circulos la orilla, como queriendo acelerar el crecimiento del lago. Ahora pegaba enormes saltos y nos lanzaba horribles y burlescos chillidos.
Dia tras dia, nosotros retrocediamos. Dejabamos atras nuestras casas, nuestras cosas, incluso a los rezagados. Nos alejabamos cada vez mas rapido, kilometros enteros. Poniamos enormes distancias entre la orilla y el campamento. Pero era inutil. Al cabo de unas horas comenzabamos a oir, como una peste, como una pesadilla, los horribles chillidos y los inertes aleteos de la picuda. Comenzabamos a olerla (un olor como a ajo, como a piel muerta) y al otro dia, incluso tal vez esa misma noche, las orillas del lago llegaban hasta nosotros.
Hasta que un dia nos despertamos con los pies mojados. Los limites nos habian sobrepasado. El lago nos habia tragado. Muchos comenzaron a correr hacia donde debian estar los limites. Algunos incluso salieron por un rato. Pero el lago crecia y crecia. Crecia cada vez mas rapido. fluia como una fuente, como una erupcion volcanica, como un rio centrifugo e imparable. Pronto fue imposible salir del lago. Luego, imposible hallar los limites. Debian seguir creciendo en algun sitio, millas afuera. Tal vez ya lo habian cubierto todo.
Para esos momentos, la picuda ya hacia estragos. Verdaderas carnicerias, autenticos regueros de sangre y tripas. Construimos nuestras casas sobre el lago, utilizando altas cañas o arboles para elevarnos sobre el agua. Pero la Picuda las serruchaba con su pico, o las echaba abajo a topetazos. Intentamos formar ejercitos, cuadrillas que nos protegieran y acabaran con la picuda. Los resultados fueron vergonzosos. Solo conseguiamos engordarla.
Luego quisimos razonar con ella. Pactar. Elaborar un sistema de tributos. Alimentarla pero de forma sostenible. No dio buenos resultados. Burlandose de nosotros, la Picuda perdonaba a los elegidos para el sacrificio y se comia a los demas. A algunos ni siquiera los comia, sencillamente los apuñalaba de muerte o les rompia los huesos a pisotones. Nos dimos cuenta que muchas veces mataba por matar. Por aburrimiento, por pura saña. Nos dimos cuenta que siempre estaba muy flaca, que comia muy poco.
Y que no se moria, que no se moria nunca. Al dia de hoy sigue sin morirse

- Solo se mueren los nuestros, nunca la picuda. Vemos algo que deambula entre los cañamos...

Si la realidad tuviese logica, entonces el lago tendria una orilla...

(entonces una enorme y horrenda cabeza, que parecia la de un camello pero emplumada y con un pesadillesco pico de terodactilo, salio de entre los cañamos y... ¡ZAS! de un mordisco arranco la mitad del cuerpo del narrador)

- Pero la realidad no tiene logica. La realidad tiene a la picuda, ¡a la picuda! ¡a la picuda! ¡corran! ¡a la picuda por todos lados! -

(¡ZAS! ¡ZAS¡ ¡ZAS! ¡ZAS!)

Ley de Murphy

Banco Nacion. Primer subsuelo. Un pasillo enorme que se bifurca en decenas de pasillos, que dan a mas pasillos, que a su vez dan a mas pasillos (que tal vez son los mismos pasillos del comienzo) formando laberintos verdaderamente borgeanos o madrigueras inconfundiblemente kafkianas.
En algun punto (todos los laberintos tienen un punto central) hay una columna de asensores. Como las furias, como las moiras, como las gorgonas, como los jueces del infierno, los asensores son tres. Lo ideal seria que uno lleve al cielo, que otro baje al infierno y que un tercero lleve justamente adonde yo estaba: la tierra de los hombres. Pero la realidad (generalmente decepcionante) nos dice que los tres hacen el mismo recorrido, del quinto piso al tercer subsuelo del banco. Ida y vuelta, ida y vuelta, todo el tiempo sin parar del menos tres al quinto, como pistones, pistones del sistema bancario. Gente que va y que viene, que fluye como el capital. Aunque el capital mas se va de lo que viene. Lo que cambia es la frecuencia del destino: el capital siempre termina en un paraiso fiscal. La gente, casi nunca va a un paraiso. Ni fiscal ni tropical. Muy por el contrario y por lo general, la gente va al infierno. Va y viene, practicamente vive ahi.
Ese infierno tiene un banco y ese banco tiene un primer subsuelo con una entrada por reconquista y otra por Bartolome Mitre. Hay un pasillo enorme y hay los laberinticos pasillos y tambien hay un punto central con asensores que vienen y van. Un espejo deforme (o no tan deforme) de la realidad.
Yo esperaba el asensor y, esperando conmigo, estaba un demonio. Era de rango menor. Lo supe de inmediato por su uniforme, un uniforme de limpieza. Ademas llevaba uno de esos carritos de plastico que integran balde, escoba, trapos y escobillon. Era un demonio femenino. Lo supe porque tenia la cara y el cuerpo de una chica joven. Morocha, teñida de rubio, inusualmente alta (mas alta que yo incluso). Era un demonio al que le gustaba la musica. Lo supe porque llevaba auriculares. Era un demonio impaciente. Lo supe porque mascullaba por lo bajo ante la demora del asensor. Se cruzaba de brazos, movia los pies y hacia pequeños gestos de desesperacion. ¿Seria tambien un demonio ocupado? Esto no pude determinarlo. Habia que preguntarle. La mire, me miro. Contacto visual, algo muy importante, casi el primer paso para acercarse a animales peligrosos.

- Es terrible lo que tardan - dice ella, haciendo referencia a los insufribles asensores. No se por que, pero esperaba que su voz tuviese algun acento. No tenia ninguno. Perfecta modulacion rioplatense.
- Para colmo uno esta descompuesto - le digo yo, señalando el asensor del medio, que ostentaba un "fuera de servicio" en letras rojas.
Ambos sabiamos que ese era el asensor del cielo. Llevaba descompuesto casi dos milenios.
- Mientras mas apurado estas, mas tardan - dice ella, queriendo expresar el colmo de su exasperación. La entiendo. Si algo puede salir mal, saldra mal. ¿sabra que Edward Murphy formalizo el principio alla por el 49? Tengo ganas de preguntarselo, pero no quiero que me crea pedante. Sobre todo porque lo soy. "todo lo que pase tiene que pasar mal". ¿acaso no es esa la logica del infierno? Es decir: Ser = Mal. De la ley de Murphy a la ley infernal hay un solo paso. Tiene sentido. - El secreto es nunca estar apurado - le respondo, y sonrio. Me devuelve la sonrisa. Ambos sonreimos. Es ilegal sonreir en el infierno. Tambien en los bancos. Doblemente prohibido. Ambos lo sabemos, y tal vez por eso las sonrisas se ensanchan. Los ojos del demonio brillan, al menos tanto como son capaces de brillar los ojos de un demonio de bajo rango. Es decir casi nada. Por eso digo "brillan" y no "resplandecen", que es un termino reservado para angeles y carteles de neon. De todos modos, aqui hay algo raro. Eso es lo que pienso. Porque los demonios jamas le sonríen a los hombres. Los torturan, si. Se los comen en ollas gigantescas, tambien. A veces hasta celebran contratos de compraventa. Pero sonreirles, jamas. Es cosa sabida. Solo se sonrien entre ellos, generalmente para burlarse de nosotros. ¿nosotros? Entonces comprendo lo obvio: yo tambien soy un demonio. Tengo que serlo por fuerza, porque de otro modo no habria estado tambien ahi, esperando el asensor, sonriendo.
Quiero preguntarle si me ve como demonio o como hombre, pero ya llega uno de los asensores. Va bastante lleno. Yo subo pero ella no. No puede subir. No se permiten los carritos de limpieza mas que en asensores vacios. Pienso con lastima que va a tener que esperar otro.

11 jun 2019

26 de Junio

Al principio algunos los llamaban "Heroes". A mi, que he vivido el futuro directo de aquel principio, aquello me increíble. Tan increible que es ridiculo: ¡Un heroe! Porque Heroe es precisamente aquel que lucha por la justicia. ¿y acaso hay algo mas injusto que una sociedad opresiva y desigual? Luchar contra el mal solo puede significar luchar contra una sociedad tal y nunca, bajo ningun punto de vista, jamas de los jamases, defenderla. Yo mismo me considero, a mi manera, una especie de Heroe.

Estas y otras cosas pensaba el Buho aquel veintiseis de Junio mientras, escondido detras de una farola de gas, eperaba en el callejon. Enfundado en un largo sobretodo era practicamente invisible en las sombras. Sus camaradas le decian el Buho precismente por eso: era sigiloso, casi no emanaba presencia. Usando esa habilidad casi de ninja y su gran sentido de la oportunidad, el Buho habia realizado incontables ejecuciones para la resistencia. Muchos creen que la sangre fria es algo con lo que se nace, pero el Buho sabia que en todo caso es algo que se puede aprender. Esa noche iba a poner a prueba hasta que punto la habia aprendido. Esa noche iba a matar a un niño.

Habia aprendido a ser despiadado precisamente de ellos, los Murcielagos Negros: el temible escuadron Anti Ilegales. Muchos pensaban erroneamente que la sigla AI venia de Artificial Inteligence. Esto tenia mucho sentido teniendo en cuenta la cantidad de armas y vechiculos inteligentes que ellos utilizaban: desde las temibles motos ARK, que disparaban automaticamente mientras el tripulante manejaba, hasta las microtanquetas Ght-320 las que, totalmente autonomas (el ultimo modelo tenia una diabolica bateria que duraba una semana entera) disparaban dosciento setenta balas por segundo desde cada una de sos ocho mortiferas Vulcan M73. Drones, Vehiculos de Salto, blindados acorazados, microcopteros tripulados via satelite. En realidad AI era "Anti Ilegales", que era una expresion propagandistica para denotar a todos los pobres, marginados y excluidos de la despotica Norteamerica del siglo veintidos.

Mientras terminaba su antepenultimo cigarrillo (aun quedaba tiempo, la funcion no terminaba hasta las once), El Buho revisaba su pasado. Quien esta pronto a matar se parece a quien esta pronto a morir: tiende a recapitular. Recordaba su escuela, el patio gris, las paredes grises, el cielo tambien gris. Quizas era porque su vida no habia sido lo que se dice feliz, pero lo cierto es que el Buho solo recordaba en blanco y negro o, a lo sumo, en escala de grises. La escuela.. los libros de historia...

Los libros de historia (es decir, los oficiales) contaban como los Murcielagos Negros se habian derivado casi directamente de las fuerzas armadas del gobierno, como una  respuesta al creciente y descontrolado caos civil que asolaba a Norteamerica a finales del siglo XX. Supuestamente habia sido ese mismo caos (asesinatos, violaciones, atentados, distintas formas de amenazas al orden establecido) lo que habia encumbrado a W y sus murcielagos en la direccion del pais. Por supuesto: estos libros eran completamente falsos, eso lo sabia muy bien. Al igual que lo era todo el material educativo oficial que polulaba en las escuelas y demas centros de enseñanza. Pura propaganda del gobierno. Inutil, de todos modos, porque aquellos que podian acceder a centros educativos eran precisamente los menos peligrosos. Ellos, los verdaderos heroes, los que luchaban contra los Murcielagos arriesgando sus vidas, nunca habian ido a ninguna escuela. Al menos no la mayoria. La mayoria se habian criado en las calles o en las fabricas. El Buho era una de las pocas exepciones. De cualquier manera sabian la verdad. Eso era lo que importaba. Con este pensamiento en la cabeza prendio otro cigarrillo. Era fantástico fumar al aire libre, sin preocuparse por los detectores de humo ni las patrullas civiles.

Miraba pasar a la gente. Un grupo de estudiantes secundarios, tal vez universitarios, pasaron arrojando botellas y risotadas por igual. Luego dos chicas tomadas de la mano. El Buho las miraba ocultando los ojos bajo el ala de su sombrero, y era como si mirase a dos animales en peligro de extinción, con una mezcla de fascinación y compasión. Porque esos seres humanos egoistas, despreocupados, completamente absortos en si mismos eran precisamente eso: algo que estaba a punto de acabarse. O al menos, asi habia sido. Asi seria siempre que fallase, pero no fallaria...

Los murciélagos negros jamas habían sido lo que se dice constitucionales. El sabia, como lo sabían sus camaradas, que los Murcielagos se originaron como una subdivisión de una poderosa compañía multinacional, la Compañia W. W era un gigantesco pulpo empresarial, uno de los monstruosos conglomerados, terriblemente influyentes y mas terriblemente diversificados(Aerolineas, Automotores, Energia, Construccion, Farmaceutica, Biologia, Mineria, Petroleras, etc), que habían crecido como un cancer durante todo ese siglo. Fabricaban desde microchips y cohetes hasta barras de cereal. Habia sido su ultimo presidente quien, luego de decadas invirtiendo en tecnologia militar, había cerrado cuantiosos y secretos contratos con areas claves del gobierno Americano. Lo que siguió era tambien bien conocido.

Poco a poco, W fue utilizando sus influencias para lograr un sector afín a sus políticas en áreas claves de la defensa y de las fuerzas armadas, incrementando las ventas de armamento y la financiacion para proyectos de investigación y desarrollo, hasta el punto en que la multinacional se habia convertido no solo en el principal proveedor del ejercito, sino también en parte de la mesa directiva.  Fue en este punto en que aparecieron las primeras señales de alarma: los grupos paramilitares.

En un principio operaban en conjunto con la policía y el ejercito: mercenarios y asesinos que utilizaban sofisticados armamentos y nuevas tecnologías, casi siempre desarrolladas por la poderosa compania W. Estos mercenarios cumplían fundamentalmente tres funciones. Primero, probaban los armamentos en el mundo real. Segundo, generaban en los sectores de la derecha radical una sensacion de regocijo y seguridad que saciaba el conocido odio que los burgueses tenían en esa época por las clases bajas. Tercero, demostraban con sus espectaculares resultados la ineficacia de la policía publica. Poco a poco se fue gestando la idea de que la seguridad privada, compuesta por estos mercenarios, era superior y hasta deseable. Lo siguiente, es decir, el golpe de estado y la dictadura indirecta de W sobre Norteamerica, había sido cantar y coser.

America, que siempre habia tendido hacia un cierto autoritarismo tanto en lo moral como en lo civil, vio de pronto recompensada las esperanzas de sus elementos mas conservadores. Se instauro un estado policial fundamentado en el terror. Mercenarios que eran a un tiempo jueces, jurados y ejecutores. O simplemente ejecutores, dado que los juicios quedaron completamente en desuso. Era la tan temida pesadilla Orwelliana, pero con los mas siniestros toques de la ciencia ficcion. La resistencia habia surgido casi instantaneamente y, al menos al principio, con bastante fuerza. Luego habian ido perdiendo elementos. Es decir, vidas, camaradas. Las armas cortas y los fusiles casi nunca eran suficiente para enfrentar las temibles armas de los escuadrones de W. Los escuadrones de la muerte atacaban casi siempre de noche, utilizando dispositivos de camuflaje (todo esto antes de la guerra abierta en la que se encontraban actualmente), razon por la cual los habian apodado primero Ratas y luego Murcielagos, que son como las ratas pero con alas.

La resistencia se habia vuelto, con el correr de los años, mas y mas dificil. Tambien mas  y mas violenta. Los frecuentes combates, primero clandestinos, luego directamente abiertos, habian acabado con la vida la mayoria de los rebeldes. Fue entonces que El, El Buho, que no por nada era uno de los mas brillantes espias de la resistencia, encontró la forma de ganar esa guerra ya practicamente perdida. Infiltrandose en los sistemas de W, encontro aqui y alla una serie de documentos secretos. Secretos, es decir, mas secretos que los de costumbre: Secretos hasta para los altos directivos de W. Solo la presidencia y los inversores mas podererosos tenian acceso a ellos. En estos documentos consistian en su mayoria en reportes historicos: Contaban como habian succedido las cosas realmente. Una vez que el Buho los leyo, ideo un plan. Era un rumor casi centenario que dentro de las numerosas divisiones de W. habia varias divisiones secretas abocadas a proyectos especiales o estrafalarios y que, una de estas divisiones investigaba el desarollo de una maquina del tiempo. La solución era clara: Si no se podia ganar al guerra en el presente, se la ganaria en el pasado o en el futuro. En cual de los dos seria cuestion de ensayo. Lo importante era robar la maquina del tiempo.

Lograr esto ultimo llevo años. Y vidas. Sobre todo vidas. Lo primero fue encontrar los documentos que asegurasen su existencia. Luego habia que comprender su funcionamiento y conocer su ubicacion exacta: todo esto antes de dar el golpe. El Buho habia estudiado los planos del complejo en donde tenian guardada la maquina. Aunque consiguiera infiltrarse y conseguir las credenciales y tarjetas de acceso (esto de por si ya hubiera sido un milagro) de ninguna forma lograrian llevarse la maquina. La maquina misma tenia el tamaño de misil. La unica forma de sacarla del complejo de alta seguridad era desarmandola, lo cual era sencillamente imposible. Tendrian que activarla ahi mismo, si era posible. Y si no era posible, deberian intentarlo y morir intentandolo. En el caso de que fuese posible, solo tendrian una oportunidad y, segun habia entendido del estudio de los manuales y planos de la maquina, solo una persona podria viajar. Nadie sabia de las posibles consecuencias y efectos fisicos y mentales de un viaje en el tiempo. Teniendo bien claro que era su plan, el mismo se habia ofrecido como primer voluntario. Y aunque entre los rebeldes no faltaron otros valientes que tambien se ofrecieron, finalmente el fue quien salio designado. Pensandolo objetivamente, era lo mas indicado segun la naturaleza del plan. Y los miembros de la resistencia eran ante todo gente objetiva.

Dieron el golpe el dia 26 de Junio de 2192. Casi toda la resistencia sobreviviente habia participado del asalto. Varios cientos habian muerto casi instantaneamente en ataques suicidas contras las entradas del complejo, solo a modo de distraccion. Sabian que era un sacrificio necesario para permitir que un pequeño puñado se infiltrase. Varias decenas mas ya estaban infiltrados como trabajadores y elementos de seguridad. Todos, sin exepcion, serian descubiertos y ejecutados luego del asalto. El Buho y varios mas lograron llegar a la puerta de acceso que daba a la maquina casi sin entablar combate, pero fueron descubiertos por drones centinelas y casi todos murieron el combate. El Buho y cinco mas lograron acceder a la maquina. Esos cinco defendieron la puerta el tiempo justo y necesario para que el Buho activara la maquina y entrara en ella. Ni siquiera tuvo tiempo de ponerse la ropa de epoca que habian preparado para la ocasion. Viajo con su traje de soldado, la mochila con ropa y dos o tres armas automaticas. Lo ultimo que vio, antes de desvanecerse en el tiempo y el espacio fue a los drones entrando en la habitacion y acribillando a sus compañeros...

Y ahora, dos años despues pero tambien ciento doscientos treinta y siete años antes, vestido como Humprey Bogart, escondido en aquel callejon de Park Row, vigilando la salidas exteriores del teatro, esperando bajo la sombra de un farol de gas.

Los calculos del viaje no habian sido exactos. La fecha de retorno tenia que ser para el dia 26 de Junio de 1955. Habian elegido la misma fecha, 26 de Junio, para dar el golpe precisamente por practicidad. Asi solo habia que calcular la diferencia pura en años, sin preocuparse por los meses o dias. Al parecer el seteo de la maquina no habia sido preciso, pues habia vuelto el 26 de Junio, pero de 1953. Por consiguiente, tuvo que pasar dos años viviendo en ese pasado remoto. Esos dos años le sirvieron para comprender muchas cosas y tambien para disfrutar de las maravillas del viejo mundo, en donde todavia se respiraba algo de la mitica libertad. Algo de lo que en su epoca se hablaba como si se hablase del pais de Jauja. Las cosas que comprendio fueron muchas, pero todas se podian resumir en la comprobacion de que los germenes del infierno del futuro ya estaban presentes aun en ese mundo todavia feliz.

El plan que habian trazado era preciso y cuidadosamente forjado. Fue por eso que el decidio esperar, fue por eso que no intento dar el golpe antes. Un buen terrorista sabia siempre esperar la oportunidad perfecta. Y el Buho era un excelente terrorista. Pero en este caso era distinto. No tenian que esperar a que la oportunidad viniera tarde o temprano. Habian estudiado el pasado, sabian exactamente cuando llegaria la chance perfecta, y esa chance era la noche del 26 de Junio de 1955, precisamente a la salida del teatro de Park Row.

El estudio de los documentos clasificados hackeados de W. establecian que el ultimo presidente de la compania antes de la institucion de la dictadura habia sido el ideologo de la misma. La compania W. era, como muchas otras companias americanas, una especie de dinastia hereditaria en donde los hijos heredaban las acciones de sus padres. Por consiguiente, no era raro que el hijo del principal accionista y por lo tanto dueño de la compania se volviese el nuevo dueño. A rey muerto, rey puesto. La compania W no era la exepcion en este aspecto. Habia sido creada a principios del siglo veinte y se habia mantenido en manos de la familia fundadora via un linaje de acciones padre - hijo.

Teniendo esto en cuenta, el Buho comprendio que la unica forma de ganar la guerra era evitandola. Por supuesto, lo ideal habría sido destruir completamente la compania W. en sus inicios. Como solo podía viajar una persona esto era casi imposible de lograr. Ademas, la compania W no se habia diferenciado de otras companias similares sino hasta finales del siglo XX, es decir, cuando siguiendo la direccion de su ultimo presidente corporativo se habia transformado en un ejercito tecnologico. ¿porque habia sido la compania W y no ninguna de sus competidoras, tan diversificadas y poderosas como la misma, la que habia instaurado el futuro tal como era? El Buho estaba seguro de esto: era por las ideas de aquel ultimo presidente. El habia sido la causa, habian sido sus decisiones las que habian cambiado las cosas. Entonces el objetivo era claro: eliminarlo.

Y el 26 de Junio de 1955 la dinastia W. habia ido al teatro. Estaba el los registros. ¿por que estaba en los registros? Era imposible de saber, porque esos mismos registros estaban cifrados e incompletos. Algo de importante debio de tener esa noche de hace mas de 200 años en el pasado. Lo importante es que estaban reunidos los ultimos dos presidentes de W: Padre e hijo. Es decir, todo lo que estaba mal o iba a estar mal en el mundo podia ser borrado de un plumazo... o mas bien de un plomazo. De cualquier forma era una oportunidad perfecta, quizás irrepetible, para acabar con el mal antes de que inciara.
¿como seria el mundo sin los murcielagos negros? Lo primero que se le vino a la mente fueron las caras, las inumerables caras de todos sus camaradas caidos. Las ciudades en ruinas, el odio acumulado. Tenia la mano en el revolver, el revolver en el bolsillo de la gabardina. Dispararia. Dispararia todas las veces necesarias.
El Buho pensaba esto mismo cuando noto que la gente comenzaba a salir por la puerta: La funcion en el teatro habia terminado. Empezaba su propia funcion.

- Fuerza, Joe - se dijo para si mismo. En esta epoca habia adoptado el nombre de uno de sus camaradas caidos, Joe Chill. Joe solia tener una buena suerte a prueba de todo. Le habia durado casi hasta el final. Habia sido uno de los que murieron defendiendo la puerta. Joe, Angela, David, Shawka, Tek. Los camaradas caidos. Los rostros desfilaban. Todavia no habian nacido. Y alla ya estaban muertos. El publico salia de uno en uno y de dos en dos. Joe Chill los miraba pasar como si esperara a alguien, disimulando, la mano ferreamente apretando la empuñadura del revolver. Todos muertos o no nacidos. ¿habria algun punto en la historia donde estuvieran vivos? Podria haberlo. Todos, incluso el mismo, nacerian en aproximadamente ciento cuarenta años. Habia estudiado minuciosamente la cara de los objetivos.
Finalmente los vio salir. Fueron los ultimos, casi los ultimos. Habian salido diez minutos despues de la gran masa de gente. Noto que eran tres. La esposa, claro. Habia leido que el teatro era una actividad familiar. ¿Tendria que matar tambien a la mujer? Daba igual. Le sobraban balas. ¿Los vio acercarse o fue directamente hacia ellos? Lo importante es que estuvieron de frente, y entonces...

El señor Thomas Wayne no vio venir al extraño. Estaba concentrado escuchando, o haciendo de cuenta que escuchaba, los comentarios que su esposa hacia sobre la obra. -Pobre Martha - penso para si - tan tonta para el Teatro, si es notorio que no ha entendido nad...
El disparo fue directamente a la cabeza. Posiblemente no llego a escucharlo. Pero la señora Wayne si tuvo tiempo de gritar. Fue un grito corto y espantoso, un grito de un segundo. Lo suficiente para que Chill apuntara y disparase de nuevo. El tiro fue directamente al pecho, buscando el corazon. La bala atraveso en su camino un cuantioso collar de perlas, fruto del buen presente de industrias Wayne. Cuando el cuerpo se desplomo, el asesino disparo de vuelta, remate a la cabeza. Dos vidas en poco menos de tres segundos. Muy propio del Buho, orgullo de la resistencia. Volvio a apuntar.
Enfrente suyo estaba un niño de ocho años, de diez a lo sumo. Vestia de forma elegante. Igual que sus padres. Se notaba que era bien educado, igual que sus padres. Y pronto iba a estar muerto, igual que ellos. Los ojos de ambos, del niño y del malo, se encontraron. Fue solo por un segundo, pero el Buho dudo. ¿realmente era culpable aquel chico de todas las atrocidades? No. Aun no lo era. Aun... No podia, no correria el riesgo. El Buho apunto a la cabeza, exactamente al centro exacto entre los ojos, y disparo.

Gotham era una ciudad peligrosa. El asesinato del matrimonio Wayne y de su pequeño hijo, heredero de la cuantiosa fortuna y todos los bienes de Industrias Wayne, ocupo las tapas de los diarios durante meses. Hubo numerosas especulaciones y diferentes sospechosos del crimen. Una de las teorias apuntaba a un tal Joe Chill, un maleante que durante los ultimos años se habia dado a conocer en los bajos fondos. Los inversores de la fundacion Wayne ofrecieron una recompensa millonaria para quien entregase al criminal. Pese a esto el tal Chill jamas aparecio. Ni siquiera habia registros suyos. Era lo mas natural, puesto que el verdadero Joe Chill naceria en 207 años.




4 jun 2019

48

Veintiuno, veintidos, veintitres, veinticuatro, veinticinco. Los billetes de cien pesos formaban una pila ordenada. Los miro unos instantes y despues se los metio en el bolsillo asi como estaban. Ayudo al tipo a bajar el bulto y despues fue al kiosko a comprarse dos botellas de cerveza. Las dos botellas costaban cien pesos. Era una cerveza amarillenta y sin cuerpo. Algo como un cadáver de cerveza. Pero mas le valía acostumbrarse. Era lo único que tomaría de ahora en adelante. Al menos por un tiempo.
¿al menos por un tiempo? Penso mientras sonreía. Un tiempo que podía ser eterno. O muy corto. A lo mejor "un tiempo" era todo el tiempo que le quedaba de vida. Todo dependía de cuanto le duraran esos veinticinco billetes. Quiero decir veinticuatro, porque ya se había gastado uno. Podía comprar cuarenta y ocho de esas horribles botellas de pis gasificado.
¿como saldría de aquello? Es decir... ¿hacia falta salir? Salir implica siempre que hay algun otro lugar, generalmente un lugar mejor, adonde ir. Salir carece completamente de significado si no hay afuera. Y, ¿lo había? Veamos - se dijo a si mismo - Si fuese Bukowski o Dostoievski escribiría algún poema o algún cuento. Algo soberbio y hermoso. Sublime. Algo sobre el hambre o la pobreza o el amor o la destrucción del mundo. Orwell habia escrito mientras dormia en las calles con los tuberculosos de Londres. Hamsun habia escrito muriendose de hambre. Artaud había escrito en el infierno de Ville-Evrard. Claro que Dostoievski y Hamsun podian hacerlo porque tenian apriori siempre algo para decir. Para ser buen escritor no alcanzaba con ser pobre y marginal. Era al revés: pobres diablos y marginales los había abajo de cada piedra (literalmente, como en aquel grabado de Goya) pero solo los buenos escritores podían darse el lujo de ser unos miserables indigentes y aun así seguir siendo lo que eran en lo mas intimo de su alma. El resto, el mismo incluido, se corrompía o simplemente se quedaba en lo estrictamente miserable. La genialidad no lo iba a sacar de donde estaba por la simple razón de que nunca la había tenido.
A esto ultimo había que sumarle que vender poemas y cuentos era algo que funcionaba en el siglo dieciocho o en el diecinueve. Hoy en día con la Internet y con todas las publicaciones del planeta al alcance de la mano eran pocos, por no decir ninguno, los que iban a soltarle unos mangos por alguna barrabasada que pudiera escribir.
Se sentó y apoyo los pies en la silla libre. La silla libre era la única silla que le quedaba. Tambien estaban la mesa, la cama, la mesa de luz, la ventana con su cortinado. La cocinilla de dos hornallas era el invitado de lujo de aquella fiesta. ¿que mas había en el departamento? No mucho mas. Un baul, un viejo ropero destartalado y lleno en su mayoría de perchas. Dos o tres camisas, dos pantalones, una campera de cuero raída y en las ultimas. Bolas de naftalina, colillas de cigarrillo, un cenicero de falso cristal. ¿Habia nombrado ya a la ventana con el cortinal? Si, si habia. Un cortinal blanco y sucio que uno de estos dias se decidiria a tirar por la ventana, hacia el callejon adonde revoleaba las botellas vacías que no eran retornables. Las botellas caian silenciosamente y estallaban con un ruido sordo. A veces ladraban los perros, a veces no.
¿que iba a hacer cuando se le acabaran las cuarenta y ocho botellas? Lo que haría era obvio. Vendería la cocinilla. O la mesa. Quizás incluso cambiase la silla por lo que le dieran en la polleria de la esquina. Era irónico el mundo en el que vivían, que valoraba mas una mesa o una silla que un poema o un cuento que hablase de lo que sea. Luego serian las prendas de ropa con perchas y todo. Luego quizás consiguiera desmontar el bidet y el inodoro. De cualquier modo para cagar le bastaba un agujero. Lo importante era mantenerse fiel al credo, nunca traicionar a su Dios. El era escritor, era escultor, era pintor... en realidad no tenia la menor idea de lo que era, pero al menos sabia que era un visionario, que era un artista. Claro que para que ser un artista había que crear la obra. Pero eso no se podía forzar. La inspiración vendría tarde o temprano o no vendría. Así de sencillo.
Las paredes blancas, el techo gris. El piso de un color indefinible. Su celda, su camarote, probablemente su tumba. Abrió la primera cerveza. Lleno el cacharro que usaba por vaso y lo vació al instante. Luego repitió la operación. Era copiar y pegar. El mismo ritual de siempre. Primero hasta el borde y luego hasta el fondo:

- ¡ArribaAbajoAlCentroyAdentro! - grito para si mismo y vació el vaso.

Copiar y pegar, copiar y pegar. La botella terminaría, como siempre, por acabarse. ¿por que? ¿por que se acababa la botella? ¿no era casi tan misterioso que se acabase como lo hubiera sido que nunca lo hiciera? Mientras abría la segunda botella (un rapido movimiento del encendedor y ¡zip! ¡voila!) decidió que una botella infinita tendría mas sentido que una que, como esta, se acabase luego de unos pocos vasos. Copiar y pegar. ¿estaba triste, estaba contento? Como de cualquier manera no estaba ahi, la pregunta no era importante. Comenzó a reírse en estallidos cortos. Sentía que las paredes se alejaban, que el departamento entero desaparecía. Las pastillas hacían un efecto soberbio con el alcohol. Ahora no estaba ahí en lo absoluto, ahora podía reírse.
¿no estaba ahí? ¿y donde estaba? Estaba en la tierra soleada y en las selvas verdes de los Yungas. Tenia veinte años menos. El sol le entraba por las pestañas. Abrio los ojos y vio un universo celeste y verde. El cielo era de un magenta furioso. La vegetacion lo hacia pensar en el mundo perdido. Era un mundo sobre las nubes. A los pocos metros, como siempre, estaba Dina. Dina era, obviamente, Dyna Glyde, una verdadera belleza de dos ruedas. Le habia costado practicamente la casa que habia heredado de su abuela. El resto se lo habia gastado viajando con ella. Pese a todo, no se arrepentia. Dina era el amor de su vida. Ademas lo habia compensado permitiendole constantes infidelidades. Giro la cabeza y recordo a Elaine. Pero mas que recordarla la estaba viendo. Ahi estaba, tendida a su lado en una reposera. Podia ver sus piernas largas y torneadas. Toda ella era como una escultura de bronce. ¿estaban frente al mar? Pero eso habia sido despues, mucho despues, casi al final. O mejor dicho al principio. Ella fue casi lo primero que desaparecio. Lo primero por supuesto fue el dinero. Todo lo demas habia ido ocurriendo como obedeciendo a una mecanica despiadada y universal. Claro que el no habia hecho mucho por evitarlo. Cuando se fue Elaine, por ejemplo. Supo que vendrian otras y vinieron (Carla, Romina, Maria) pero no fue sino hasta que tuvo que dejar a Dina (ella nunca lo hubiese abandonado) que supo que su vida habia terminado. Su vida como algo activo y determinante, como algo colorido, como algo, valga la redundancia, vivo, habia termnado. Le quedaria, le quedaba ahora un mero durar, un hueco persistir que era como la estatica de una radio que no sintoniza nada.
Abrio los ojos y vio que las paredes se habian vuelto a acercar, que estaban mas cerca que nunca. Suspiro y se puso de pie. Aun no era demasiado tarde. Bajo las esclaeras sonriendo: Todavia podia comprar cuarenta y ocho botellas.