26 jun 2019

La Picuda

Si el lago tuviera limites la picuda nunca nos daría alcance.

- ¿el lago? -

El lago, por supuesto. Un lago, por definicion, es una masa de agua, generalmente de extensión considerable. Seguro ustedes, que nacieron hace poco, no entienden a lo que me refiero. Antes todo esto solo era una parte, y el lago estaba delimitado. La picuda solo llegaba hasta el limite. No podia pasar de ahi. Nosotros si podiamos. Ibamos un poco mas alla y no podia alcanzarnos. Hasta nos burlabamos de ella. Era divertidisimo.

- ¿todo esto? ¿el lago? - 

Es natural que no lo entiendan. Por definicion... no. Por Logica, un lago siempre esta delimitado. Del mismo modo las montañas dan al valle y la los cuerpos en a la luz generan sombra. Un lago que no tuviera limites seria infinito. Y un lago infinito dejaria de ser un lago... seria...

- ¿Seria... -

Seria todo, pasaria a ser todo, a ser la realidad misma. A ser lo que es ahora, lo que ustedes ven y tocan. Ahora es todo lago. O mas bien: lo que ahora es todo lago antes era parte lago y picuda y parte tierra y nosotros burlandonos. ¿entienden?

- No entendemos -

Hum... supongo que hay otra forma de explicarlo. Desde otro angulo, tambien podria definirse al lago como el limite mismo de la Picuda. Entonces, si hay picuda es lago, si no hay picuda, ya no es lago. ¿Esto lo entienden?. Bien. ¿Se puede escapar de la picuda?

- No se puede. Lo que encuentra se lo come, lo que persigue lo mata, y si no encuentra, busca - 

Exacto. Vivimos aterrorizados por ella. Siendo despedazados por su pico. Siendo tragados por su largo cuello. Sus plumas nos cortan la cara y las manos. Sus garras nos parten los huesos. Sus horrendos chillidos nos despiertan en plena noche. Sus fauces mastican a nuestros hijos y sus intestinos digieren a nuestros padres. Pero eso solo es ahora. Es un largo ahora que parece un siempre. Pero no lo es. Antes no lo era.

- ¿y entonces? - 

Entonces es importante tener memoria. Porque saber que lo que es, no fue, es saber que lo que es puede volver a dejar de ser. Es saber que las cosas pueden cambiar.

- La picuda dice que siempre fue -

No la escuchen. Si no pueden escaparse, si no pueden resistirla, al menos no la escuchen, Lo le presten oido, Si vamos a morir, al menos que sea en posesion de la verdad.

- ¿como pudo pasar? Lo que es, tiene que haber sido. La picuda tiene razon - 

Bueno, supongo que ya es tarde para ustedes. Despues de todo, no son otra cosa que alimento de Picuda. Pero yo tampoco se como ocurrio. Un dia, como si nada, la logica de la realidad se desplomo. Cayo. Dejo de funcionar. Los limites invisibles se rompieron y el lago empezo a desbordarse. Crecia dia tras dia, como una sombra. Y nosotros, que siempre nos habiamos burlado de la picuda, de ese mostruo inmundo, solitario, maloliente y patizambo, comenzamos a temblar al ver que las orillas del lago llegaban hasta nuestras casas, hasta las casas de nuestros amigos.
Y la picuda, practicamente no se habia comido a nadie durante decadas, que habia soportado las burlas de grandes y pequeños, que habia sido apedreada y alimentada con desperdicios, ahora reia dia tras dia. Ahora recorria freneticamente en circulos la orilla, como queriendo acelerar el crecimiento del lago. Ahora pegaba enormes saltos y nos lanzaba horribles y burlescos chillidos.
Dia tras dia, nosotros retrocediamos. Dejabamos atras nuestras casas, nuestras cosas, incluso a los rezagados. Nos alejabamos cada vez mas rapido, kilometros enteros. Poniamos enormes distancias entre la orilla y el campamento. Pero era inutil. Al cabo de unas horas comenzabamos a oir, como una peste, como una pesadilla, los horribles chillidos y los inertes aleteos de la picuda. Comenzabamos a olerla (un olor como a ajo, como a piel muerta) y al otro dia, incluso tal vez esa misma noche, las orillas del lago llegaban hasta nosotros.
Hasta que un dia nos despertamos con los pies mojados. Los limites nos habian sobrepasado. El lago nos habia tragado. Muchos comenzaron a correr hacia donde debian estar los limites. Algunos incluso salieron por un rato. Pero el lago crecia y crecia. Crecia cada vez mas rapido. fluia como una fuente, como una erupcion volcanica, como un rio centrifugo e imparable. Pronto fue imposible salir del lago. Luego, imposible hallar los limites. Debian seguir creciendo en algun sitio, millas afuera. Tal vez ya lo habian cubierto todo.
Para esos momentos, la picuda ya hacia estragos. Verdaderas carnicerias, autenticos regueros de sangre y tripas. Construimos nuestras casas sobre el lago, utilizando altas cañas o arboles para elevarnos sobre el agua. Pero la Picuda las serruchaba con su pico, o las echaba abajo a topetazos. Intentamos formar ejercitos, cuadrillas que nos protegieran y acabaran con la picuda. Los resultados fueron vergonzosos. Solo conseguiamos engordarla.
Luego quisimos razonar con ella. Pactar. Elaborar un sistema de tributos. Alimentarla pero de forma sostenible. No dio buenos resultados. Burlandose de nosotros, la Picuda perdonaba a los elegidos para el sacrificio y se comia a los demas. A algunos ni siquiera los comia, sencillamente los apuñalaba de muerte o les rompia los huesos a pisotones. Nos dimos cuenta que muchas veces mataba por matar. Por aburrimiento, por pura saña. Nos dimos cuenta que siempre estaba muy flaca, que comia muy poco.
Y que no se moria, que no se moria nunca. Al dia de hoy sigue sin morirse

- Solo se mueren los nuestros, nunca la picuda. Vemos algo que deambula entre los cañamos...

Si la realidad tuviese logica, entonces el lago tendria una orilla...

(entonces una enorme y horrenda cabeza, que parecia la de un camello pero emplumada y con un pesadillesco pico de terodactilo, salio de entre los cañamos y... ¡ZAS! de un mordisco arranco la mitad del cuerpo del narrador)

- Pero la realidad no tiene logica. La realidad tiene a la picuda, ¡a la picuda! ¡a la picuda! ¡corran! ¡a la picuda por todos lados! -

(¡ZAS! ¡ZAS¡ ¡ZAS! ¡ZAS!)

2 comentarios:

Jora dijo...

¿En qué te basaste para escribir sobre el lago y la piculda? Creo que alguna vez le mencionaste algo sobre la picuda a Celeste. Me imagino que le pusieron “la picuda” a algún pato de los bosques de Palermo…

BlaBleBli dijo...

que interesante que preguntes. Bueno, en realidad tanto la idea del lago que crece como la picuda y el mismisimo nombre, "la picuda", me vino en un sueño que tuve el dia anterior a escribir el cuento. Fueron un par de imagenes donde una especie de dodo monstruoso desgarraba a picotazos a otros bichos. Despues escuche una voz que decia una frase similar a la que abre el cuento.
Me parecio terrorifico el nombre "la picuda". Es curioso porque Celeste lo leyo y la primera impresion que tuvo fue que justamente la expresion era horrorosa.