12 mar 2014

La ciencia como Peligro

La nocion de "progreso", de progreso humano, nacida con el positivismo de Comte, estuvo a lo largo del mil ochocientos y de la primera mitad del mil novescientos, asociada casi inseparablemente a la nocion de ciencia o tecnica, tambien llamada tecnociencia. Actualmente y desde hace unos 50 años (tal vez mas) dicha asociacion ya no resulta tan evidente; Ya no es tan obvia, tan clara: Se ha erosionado. La actitud pensante no posee ya una tecnofilia o una epistemofilia inocente, o al menos no deberia poseerla. La actitud necesaria, filosofia de la tecnica mediante, deberia ser al menos de sospecha, una actitud vigilante. 
Es notorio que, a raiz de pensadores como Adorno, Cioran, Bataille, Marcuse, Ortega y Gasset, y sobre todo Heiddeger (tambien podria nombrar, aca bien cerca, a Sabato desde lo literario) la manera de pensar la tecnica se ha movido desde la linea del positivismo utopico hacia la critica, llegando incluso al existencialismo (Sartre y Camus) e incluso al nihilismo ateo. Se ha advertido acerca de la peligrosidad de la tecnociencia, su caracter manipulador, su terrible potencia para re - configurar la realidad. La escencia de hombre, el sustancialismo y escencialismo, la vision simbolica del hombre y de la sociedad humana, ya en una visible decadencia (nihilismo filosofico y politico) desde la epoca "post Nietzsche", muerte de dios mediante, se ha visto acelerada por la tecnica; Esta es un factor que tiende a globalizar los valores, a crear una isostenia de estos, y por ende tambien una indiferencia y un relativismo, y a la vez es esteril para aportar elementos que configuren una nueva antropologia, que es lo que tanto se necesita hoy en dia. 
La neutralidad de la ciencia, su aparente pureza cognitiva, es algo que ya no resulta obvio, siendo al menos discutible. La Liberta de investigacion, eso de "la ciencia por la ciencia", o ciencia pura,  principio que a lo largo del siglo pasado era intocable y punta de lanza del pensamiento filosofico cultural y social, es hoy en dia mirado con ojos desconfiados. Ya no nos sentimos seguros con la ciencia libre, salvaje, merodeando sin control cerca de nuestras casas y nuestras vidas, e incluso una pregunta que se ha realizado con insistencia es esta: ¿Es necesario algun control, alguna moratoria para la tecnociencia? ¿hasta donde es etico permitir la investigacion, el avanze, la experimentacion? ¿Acaso el "en nombre de la ciencia" no debe detenerse ante nada?
El problema esta bien expresado en las palabras de Franco Volpi: "hoy nacen dudas respecto de la identificacion inmediata entre el progreso cientifico - tecnologico y la realizacion cultural y espiritual del hombre". "Hombre" y "ciencia" presentan, cada vez mas, una incompatibilidad. El temor es este: El terrible, titanico y al parecer indetenible crecimiento del imperio de la tecnociencia, ¿erradicara en su marcha la realizacion humana, empobreciendo sus simbolos hasta destrurlos? ¿Puede, tiene la capacidad el hombre para transformar su esencia a la velocidad que la marcha tecnologica impone?. Esto mismo es lo que advertia Heiddeger hace 50 años:
"Lo que es verdaderamente inquietante no es el hecho de que el mundo se convierta en un mundo completamente tecnico. Mucho mas inquietante es que el hombre no esta, de hecho,  preparado para esta transformacion del mundo".

En una nota posterior, Heidegger enunciaba como un problema clave el de asignar un sistema politico que sea acorde a la era de la tecnociencia. Ya por esta misma epoca, las distopias de escritores sobre todo Norteamericanos y Rusos (no por nada los paises a la vanguardia cientifica, insignias de los dos grandes modelos de desarrollo de la epoca) denunciaban la peligrosidad de que la rueda de la tecnociencia girara ya por si misma, fria y metalica, ajena a todo humanismo, a todo espiritu. 
En otras palabras, es necesario conocer la esencia de la tecnica, para determinar, si no es demasiado tarde, la gobernabilidad de esta. Caso contrario, parece que nos quedaria marchar bajo el gobierno de la tecnica, siendo toda filosofia un mero acompañamiento, una mera bandera de la ciencia (en el caso de las filosofias positivistas), sin libertad especulativa, o un mero escape o divertimento (en el caso de las epistemologias) equiparable a la mistica o la religion, e incluso a los conocimientos paranormales. Las revoluciones tecnologicas e industriales son incapaces de producir experiencias simbolicas que nos situen dentro del mundo; Son incapaces de crear cultura, de asignarnos una funcion, de contribuir a una cosmovision que nos lleve a un plus ultra del nihilismo. Asi, en el desarraigo creado por la ciencia pura, lo unico que conseguimos en cuanto seres humanos, es una aceleracion de la conciencia nihilista, del desierto que crece.
Hoy en dia la nocion de progreso como telos y la de tecnociencia como instrumentacion por exelencia poseen tantos fanaticos, tantos fieles, que es casi una cuestion de logica interna el que la sensacion de descontento y de desencanto esten en aumento: Solo se ha conseguido agudizar la crisis de fundamentos y de valores que ya eran la denuncia de Nietzsche. La globalizacion hace el circulo de los valores desechados mas amplio, la velocidad de experimentacion con los valores, mas rapida. La relatividad como fuerza que socava la fe, mas fuerte. Citando nuevamente a Volpi: "se ha abierto asi una fractura cada vez mas profunda entre el homo faber y el homo sapiens, entre aquello que el hombre sabe y puede hacer, por un lado, y en su capacidad de reconocer lo que es razonable hacer, por el otro."
La ciencia y la tecnologia nos da sencillamente potencia de acto, tanto colectivo como individual. Es solo capacidad de hacer, potencia en el sentido de Plotino o Spinoza. La ciencia nos enseña a hacer un monton de cosas, variadas y hasta increibles, pero no nos proporciona guia alguna acerca de lo que esta bien o esta mal realizar. Esta guia, segun mi opinion, faltaba desde mucho antes. No es cosa de culpar a la tecnociencia de destruir la brujula de los valores. Es solo que, al ampliar enormemente el campo de accion y los modos de actuar, ha hecho mas patente la falta de valores que sufre occidente. La ciencia no tiene otro limite que lo cientificamente posible. Bergen - Belsen, las bombas atomicas, el genoma humano, el acelerador de particulas, la clonacion, el MK Ultra, son pruebas de esta aeticidad de la conducta cientifica. Es natural entonces que, a la par de los refugios espirituales de la epoca new age, ocurra tambien un reflote del espiritu religioso de la epoca; Pero no ya como un templo que se erija sobre la espiritualidad vital de la epoca, fiel expresion de la cosmovision, sino como un oasis artificial, como un cuarto acolchado, ultimo refugio en una epoca que nos obliga a resguardarnos en nuestra interioridad. La filosofia no esta extenta, si cae en un mero enciclopedismo, de este peligro.  
El problema se decanta entonces para el lado del nihilismo, de la falta de valores que aun signifiquen algo. Los valores humanisticos de occidente vienen en su mayor parte de dos vertientes: La helenica y la judeo cristiana. Ante la muerte de estos dioses, ocurrida en los ultimos 2000 años ("Ya casi 2000 años, y ningun dios nuevo!"), surgio la nueva fe en la ciencia y en la razon, algo asi como un neo romanticismo racionalista. Si nos vemos tambien despojados de esta nueva fe, ¿que actitud deberiamos adoptar?¿un hundimiento indiferente, un vivir a fondo el nihilismo? ¿una resistencia ascetica, cinica? ¿un contramovimiento? ¿y como? ¿Via el arte? ¿La teologia? ¿la filosofia? 

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