Los ideales nacen en el mundo etereo de las ideas. Pero se realizan, siempre, inexorablemente, a traccion a sangre. Lo mismo pasa con el amor o con el odio. Por que las pasiones son siempre ideales. Quieren ser de tal y tal manera. Asi y solo asi. Perfectas. ¡Que ingenuidad y que valor hace falta para tenerlas! ¡Despidase de la calma y la felicidad quien se atreva! En un momento estoy en una orbita llameante y ajena a las miserias del mundo, y al siguiente me hallo sientiendo el frio y la desolacion de una region de sombra en el invierno. Y una sombra desearia ser en momentos asi. Por que, las sombras no tienen tripas e intestinos; Ni sistema nervioso que sea azotado por descargas electricas.
¡Que inocencia es esa que no siente al amor mas que como una idea! Algo asi como sentarse a deshojar flores y a pensar en hijitos y nietecitos. Querer la perfeccion, el ideal hasta en la ropa y en los dialogos, e imaginar todo eso. ¡Que niñeria! Desligarlo de todo lo egoista, de todo lo retorcido, de todo lo que tiene de torbellinesco, de absurdo y de ridiculo.
El alma o el espiritu no son capaces de amar. Lo siento mucho por Platon. Pero se ama y se odia con todo el cuerpo. Desde los dedos de los pies hasta la coronilla. Los ideales se hacen pedazos contra la naturaleza.
¿Quien se conoce a si mismo en el pozo? ¿Quien se conoce? Y hablando con claridad, ¿quien quiere reconocerse? ¿Quien es capaz de verse revuelto en el fango y en las inmundicias (a menudo irresisitibles) y de aceptarse asi? Canalla, inmoralista, desterrado, maldito, deshonesto, rapaz, libre. ¿Quien es capaz de sentirse libre? Uds prefieren sentirse buenos. Sentir esa libertad que nace de la seca y aspera moral de la negacion. Uno llega a sentirse puro a costa de la castracion de lo mas intimo.
Y sin embargo a menudo somos nuestro peor vecino. Estas cosas solo son posible por el camino de las imperfecciones y de los errores. No solo un par de hermosas alas, sino tambien garras y un pico enorme.
Y, Definitivamente, no seria posible sin la mentira. Y tampoco seria posible sin la honestidad. ¡Honestidad sobre todo en esto! Ser multiple. Estar dispuesto a sufrir.
Creo que en cierta manera queremos sufrir, queremos la destruccion. Queremos lo que tememos. Por que, si no es asi... ¿Por que la obsesion? ¿Por que los celos? No creo que sea la autodestruccion sino un autentico querer el desastre, la destruccion, el cambio. Cuando no se puede llenar un vacio con algo, se le añade cualquier otra cosa. Sin ese terror al vacio no existirian ni el odio ni los celos, pero tambien habria muchisimas menos parejas de cuatro en cuatro de dos en dos.
¡Ja, que ingenuidad! No solo creer que se puede poseer a alguien, sino creer que se conoce la naturaleza ultima de ese alguien. La ilusion de la posesion esta en creer que poseemos a una persona integra cuando lo que poseemos (siempre a la fuerza y de una manera patetica, torpe y forzada) es una vil cascara de rutinas, de "si", de algo que somos mas nosotros que la otra persona. Y despues el ahogo, el hastio, el ineludible asco que se siente ante todo lo que no es libre. Terminamos como empezamos: Hartos.
Solo nos queda salir al aire frio, a la calle. A caminar, a vagar. Es preciso sentir que no se tiene rumbo por que sabemos que la muerte nos ronda. Y ronda a cualquiera. Dejar de pensar cuando lo que nos viene a la mente es amenazante y fastidioso. El nihilismo se dispersa caminando. El movimiento del mundo, los sonidos de la naturaleza. Sentir al menos que hay una infinidad de caminos. Cualquier traseunte que se nos cruza es otro universo de posibilidades. Puede ser un suicida o un salvador. Al igual que nosotros.
Tratar de no sentir el peso del retorno de lo mismo. Sentir lo mismo como renovado, como distinto. Sentir que se avanza (Si, aunque sea una ilusion y sea cuestionable eso de "Avanzar"(¿hacia que? ¿Hacia donde? ¿Quien dijo que es bueno avanzar?, ect.))
Tener aun, despues de la niñez, un ideal. Tener el valor para seguir teniendo ideales. ¡Chocar chocar chocar!
Toda nuestra vida ser una unidad de choque.
Masomenos la idea seria esa.

Sebas.