Llena de simbolos magicos

A Celeste

hace tiempo yo tenia
un camperon verde oliva
con preciosos botones
color madera

La unica salvedad
es que no era solo mio
porque las prendas,
como la tierra,
son de quien las trabaja

La usaba, de tiempo en tiempo,
una falsa pelirroja
de cabellos castaños
que eran, a decir verdad
negros como la noche de invierno
con reflejos volcanicos
y sortijas como espirales

Por sonrisa tenia una boca
y por almendras tenia dos ojos
y en vez de frente despejada
tenia una hermosa
cabeza de aguila
y usaba siempre colgantes
llenos de simbolos magicos

Por paraiso tenia dos piernas
por sortilegio un canto de pajaro
por don de apolo palabras hermosas
por don de Pan cosas misteriosas

a veces calzaba sandalias
la pelirroja castaña morocha
a veces andaba descalza
a veces se volvia loca

Otras veces no calzaba sandalias
ni usaba ninguna otra cosa
y entonces era una antorcha
ardiendo sola en la sombra

Entonces no tenia edad
no era ni sabia ni tonta
no era ni joven ni vieja
era todas en una sola

antes o despues me miraba
desde el silencio de su aurora
con sus lindos ojos pardos
de mirada abrasadora
desde la altura de la cama
o sobre las migas de un mantel
o a traves de una sucia ventanilla
o refugiada en la choza de sus manos
sobre un cafe de madrugada

Era entonces cuando yo
desde mis ojeras infinitas
desde mis ojos de hiena
miraba esa obra de arte
de la madre naturaleza
tan sencilla, tan compleja
tan abrumadoramente ella
tan olvidada de los juicios
de bondad o de belleza

y la campera verde oliva
con botones de madera
que sin dudarlo ni un segundo
le queda mejor a ella
duerme el sueño de los justos
y de las cosas ya algo viejas
en un hueco del ropero
entre sacos y pecheras

Y aquella ninfa de los bosques
mitad lucero
mitad pantera
es ahora en el jardin
inseparable compañera
todavia rie a destajo
todavia es joven y bella
todavia es todo arcoiris
todavia es siempre sincera
y tiene dos lunas por pupilas
y por ojos dos almendras